jueves, agosto 02, 2012
Mi querida Verónica Lozada publicó en el periódico Metrópolis que circula en el Estado de México la autoentrevista que me apliqué hace poco y que pueden leer aquí:
Muchas gracias, hermosa Verónica.
miércoles, agosto 01, 2012
Un poeta que no escribe poesía
Con Daniel Casanova en Ciudad del Carmen.
por Daniel Casanova
Guillermo Vega Zaragoza es un
apasionado extremo de la vida y de la poesía. En su fértil trayectoria por el
mundo de las letras, siempre se ha distinguido por ser tan entusiasta como
eficaz en la divulgación de su propia producción y de la producción de los
demás autores que, como él, comparten el sentido de compromiso con la tinta, el
papel y la vida.
Cada
uno de los que conocemos a Memo, como cariñosamente lo llamamos, sabemos que
ama a la vida. Sabemos que es la persona que con mayor facilidad hace un amigo.
Y que nunca defraudará absolutamente ninguno de los términos en los que se ha
fincado tal amistad. Esa misma pasión y amor que tiene por sus amistades,
muchas a lo largo y ancho de la república, es la misma pasión cerebral con la
que conmemora cada verso que le arranca a su oficio de tundeteclas.
Sinsaber,
supe que iba a presentar este libro. Sinsaber, supe que estos son poemas que
han sido vividos por Memo o por las personas que Memo conoce, aunque los haya
conocido apenas un viaje en taxi desde su casa hacia el trabajo. Sinsaber,
tiene su presencia añejándose en http://ombloguismo.blogspot.com. Sinsaber, en el
D.F., Sinsaber es Colimota, Sinsaber es Acapulco Tropical, Sinsaber es
Tizayuca, Hidalgo, y es lección y clase para los poetastros amigos suyos. Pero
mucho más de lo que se pueda creer, Sinsaber es Ciudad del Carmen, es sus
playas borrachas sin playas. Es su musapoetamigaobsesión, es preguntar por qué
todos ya se fueron si apenas son las 10 (de la mañana), es sufrir por la
picadura de un mosquito pero no por el amor que tanto le ha rondado zumbándole
el alma pero sin picarle. Sinsaber es esa fuerte, feroz y entrañable resaca que
deja el deber cumplido y que no se cambia por nada en el mundo.
En
los casi nueve años de conocer a Memo, nunca he tomado un curso de poesía con
él, y es que no hace falta, porque la vida de Memo, la clase de Memo, es su
propia poesía, solamente hay que conocer a Memo para aprender a escribir
poesía, perdón, ¿quién dijo escribir? Para sangrar poesía, para sudar poesía. Contra
todo lo que diga, siempre he afirmado que si algo difícil hay en la vida
literaria, eso es escribir poesía; es como el cálculo integral. Por eso pedimos:
Dios:
líbranos de los poetas. Cárgatelos a todos de
una vez,
de nada sirven,
mas que para ponernos tristes
con palabras que hieren,
que incomodan.
Nos salpican y nos ensucian
con puras verdades.
A nadiele gusta la verdad.
A nadie le gusta verse reflejado
en palabras que ni entiende.
Por eso a nadie le gusta la poesía.
Memo
no escribe poesía, nunca la he escrito; su pluma simplemente es una soplona que
no calla lo que él vive y experimenta; aún en sus obsesiones y sueños. En
ningún momento nuestro amigo ha perdido la ecuanimidad por el sufrimiento que
sienten los que quieren escribir poemas. Memo los guarda en secreto pero su
pluma delatora los saca a la luz.
Realmente
no quiero que me vayan a malinterpretar, pero si leen este libro, seguramente
que Sinsaber, se darán cuenta de que la poesía es mucho más que cálculos
matemáticos y búsquedas kilométricas en el diccionario, observarán Sinsaber que
la poesía es mucho más que escribir poemas. Porque Sinsaber sabremos por fin a dónde carajos se fue el amor, que ya no me
visita como antes y me deja como una casa después de una fiesta.
Celebremos
Sinsaber, la felicidad que las palabras y los versos experimentan cuando la
traición de la pluma de Memo se consuma y nos enteramos de algunos secretos que
la vida real nos tiene reservados Sinsaber. Por eso:
El hombre del nuevo milenio
sólo debe pensar en consumir
y olvidarse de mariconadas
como la poesía,
que no sirve de nada.
Se los digo yo,
que escribí este poema inútil
y el mundo sigue igual que siempre.
Que Dios nos salve de la poesía.
Señoras
y señores, jóvenes, con ustedes, el maestro Guillermo Vega Zaragoza.
(Leído en la presentación de Sinsaber, en la Primera Feria Nacional del Libro de la Universidad Autónoma de Campeche, el domingo 8 de julio de 2012 en Ciudad del Carmen, Campeche)