¡No a la derrota anticipada!

por Rafael Tonatiuh

Martes 11 de Julio de 2006
http://www.milenio.com/mexico/milenio/notaanterior.asp?id=633385

A la pequeña Nadia. Feliz cumpleaños.

Disculpen que venga a agüitarles su fiesta de la democracia, pero les tengo una noticia que nadie, ni siquiera el más sabio de los cinco científicos del IFE, será capaz de refutar: hasta el día de hoy, Felipe Calderón no es ganador de la contienda electoral, oficialmente.

Los mariachis callaron. Bueno, aprovecho este silencio para recordarles que el IFE no está facultado para declarar vencedor a nadie, sino el Tribunal Federal Electoral, y este va a tener bastante chamba revisando el cochinero que hicieron en el IFE quitándole votos a Obrador y sumándoselos a Calderón (la mayoría de estos delitos electorales están documentados y abiertos al público por Internet, visitando las páginas: http://em.fis.unam.mx/public/mochan/elecciones/, www.elsenderodelpeje.com, www.youtube.com/watch?v=-mL9JhfTAdE, http://www.youtube.com/watch?v=EMUBb7eogP0).

Todavía es muy temprano para felicitar a Carlos Ahumada y a Martita Sahagún por librar los penales (y a propósito de penales, que estupenda victoria logramos sobre los franceses; y no tan sólo eliminamos a los alemanes en su propia cancha, sino que nos coronamos campeones del mundo bajo los fuegos artificiales de su celebración. Como dijera Romano Prodi: “¡Sonríe, ganamos!”)

Le recomiendo a aquellos simpatizantes del Peje que están cayendo en el jueguito psicológico de sentirse humillados y ofendidos, que por el bien de todos vayan quitándome esa carita de borrego crudo a medio morir; eso sólo beneficia a quienes desde hace varias semanas celebran sus juergas anticipadas. No les sigan el juego, necesitamos combatir alegremente, no importa que el PREP, mañosamente, haya posicionado a Calderón hasta arriba en sus conteos rápidos de salida ni que el resultado final del IFE haya calcado la misma ruta que hicieron las encuestadoras privadas, “concediéndole” una ligera ventaja al Peje para luego filtrar votos fantasma al candidato oficialista (como le llaman a Calderón en Televisión Española). Hay que esperar los resultados de las impugnaciones.

Le recomiendo al señor Fox, Bush, Zapatero, Vargas Llosa y demás lambiscones que se acumulen esta semana, que se vayan ahorrando sus felicitaciones hasta el día que el candidato oficialista tenga la banda presidencial cruzándole el pecho. Mientras tanto, fúmense un Marley y aliviánense.

Aunque a varios “periodistas” (que más bien son lectores de noticias por radio y televisión) ya les anda por ir a bolearle los zapatos a Calderón, nosotros, los mexicanos de primera (con el apoyo de los observadores extranjeros), exigimos una revisión exhaustiva de estas elecciones, absolutamente cuestionables.

¡Pecado! ¿Cómo me atrevo a llamarles elecciones cuestionables a las más transparentes del universo? En primer lugar, si el IFE no tuviera complejo de culpa no andaría inundando los medios con spots, asegurando que ellos son lo más lindo que existe en el mundo. (Estoy de acuerdo con felicitar a la ciudadanía por su asistencia a sufragar, pero las cochinadas no se hicieron sobre el papel, sino en las bases de datos. Palomita a los ciudadanos, tache para el IFE.)

Estas elecciones fueron sospechosas desde que el Gobierno Federal, algunos “periodistas”, magistrados, políticos y empresarios, le echaron toda la artillería pesada al Peje para evitar que llegara a las elecciones: videoescándalos, parajes, desafueros, etc. ¿Cómo iba Vicente Fox a ponerle la banda presidencial al “peligro” que pretendió meter en la cárcel? Es lógico que se sospeche que, teniendo todo el aparato electoral a su disposición, el presidente caiga en la tentación del fraude (cuanti-más cuando en su administración deambuló mucha rata pulguienta).

Sonríe, el Peje ganó porque tiene personalidad de líder, la gente lo quiere y todos votamos por él. Sonríe, Calderón perdió porque tiene personalidad del típico nerd al que le tiran las mochilas en la secundaria, nadie lo quiere (ni los panistas, lo aceptaron abnegadamente porque había que escoger entre Creel y Martita) y cuenta con el apoyo de la Gordillo y Madrazo.

Sonríe, basta un solo voto fraudulento para revertir el triunfo anticipado en la derrota más chafa, (claro, a menos que el Tribunal Federal Electoral también esté amañado, pero eso ya se traduciría en una desesperada invitación a la violencia). ¡Sonríe! ¡No aceptemos la derrota anticipada!